Una noche – Cuento

Una noche, como tantas, ambos se encontraban ya en la cama. Eran camas distintas, sitios distintos, en horas distintas, ambos apunto de dormir…

Uno de ellos pronto concilia el sueño, duerme rápido y profundo pero antes se arropa, se da la vuelta, aprieta la almohada tan y tan fuerte hasta hundir la cabeza en ella, sintiéndose inmortal en la paz de un silencio que solo la noche puede dar. A lo lejos un sonido viene casi imperceptible de la cocina, quizá es el refrigerador que se prende y apaga monótonamente durante la noche convirtiéndose en un sonido rutinario que pronto desvanece cuando concilia ese sueño profundo que no es fácil interrumpir, respira cada vez mas suave, sonríe y duerme con la paz que algunos sienten cuando pequeños, cuando son protegidos…

El otro no concilia el sueño tan rápido, los pensamientos le asaltan, tal como lo hace el recuerdo de la travesura infantil en los momentos más inesperados. Así, insomne, con la poca claridad que entra por la ventana desea verle dormir, y piensa, y sueña despierto, sueña con días de pasión nocturna, de la búsqueda de los sexos, de la explosión del encuentro de cuando las noches no son descanso, cuando el sueño no era un vil asaltante a mano armada, cuando ninguno cede ante el peso del día transcurrido y quiere dedicar unas horas más para saber del otro… Mira por la ventana, desea ver su alma que huye, que se embarca en un sueño mágico e irreal, que se vaya por aquella ventana y se vuelva inmortal, y le encuentre tan inmortal como se siente ahora soñando…

Besos. Esa noche soñó con besos. Para ser más exactos soñó con un largo beso; uno muy suave, muy lento, inagotable, incansable, largo, un beso que parecía eterno…

Cerró los ojos al recordar aquel sueño, la luz de la luna que invade la habitación le ha hecho un llamado a dormir. A no soñar despierto, porque la luz de luna sabe que hay sueños que uno no debe permitirse despierto, estos siempre peligran de volverse confesiones escritas en una noche como esta.

  3Comments

  1. Miguel Angel Vásquez Rodríguez   •  

    Genial!!! Me gustó, corto pero de buena factura… Un beso inagotable…!!! Que bien dicho.. Buen trabajo Claudio, felicitaciones!! Un abrazote!

  2. Jorge Jiménez   •  

    Me gustó eso de «peligran de volverse confesiones escritas en una noche como esta»

    Soñar con besos, y largos e inagotables… quiero!!!

    Sigue escribiendo Claude, mes felicitationes…

  3. ARELY CALDERON   •  

    Muy lindo el cuento, lo sentí como la añoranza de algo que se espera con mucha paciencia, pero que al llegar es bello e inagotable. Sweet, sigue Clau.

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